11 de septiembre de 2015

Éxodo

Con la poesía de la gran @OlgaDrabkina_

Triste exódo, exilio de palabras heridas que vuelan hacia una tierra prometida. Ojos vacíos que mojan de rabia la historia, huidas a contareloj que destruyen la inocencia y los sueños de cualquier niño.
Triste futuro fruto de la inseguridad del vacío de un presente de convivencia ilegítima con la oscuridad. Con la muerte.
Triste (aun más si cabe) nuestras manos fronterizas manchadas con la sangre que dejan los sueños rotos colgados en alambradas de odio. Llenas de esa sangre que se pierde en la sal, heridas, de mares de indiferencia.
Tristes corazones bombardeados con nuestra avaricia, cansados de llenar sus venas de humo, cansados de contruir carreteras de polvo y fracaso con destino a ningún lugar.
Eterno otoño en el que el filo de las hojas te arranca la música de la boca y lo único que se escucha es el eco de los miedos retumbando en las paredes de la vida.
Cuando llegar a casa es susurrar "hogar" al camino y la dura doctrina de la rutina se reduce a pies destrozados. Ampollas de melancolía de una tierra cultivada con el hambre, regada con las bombas. 
Injusticia.

Y nosotros, bienestar en estado puro, quizás debamos aprender de las ganas de futuro de sus uñas agarradas a la vida. Quizá debamos comenzar a alzar la bandera de la poesía. 
Y la solidaridad.

26 de julio de 2015

Retrato herido.

Hoy me vi delante del espejo.
La verdad es que hacía ya bastante tiempo que no me miraba a los ojos. Así que decidí desnudarme. Observar.
Rastreé cada milímetro de mi piel, como quien busca un desahogo a la rutina, un escape a la mediocridad. Tendencias suicidas a base de olvido. Cadenas.
Y encontré. Me encontré.
Hallé miedo entre las dudas. Arañazos y moratones. Resultado de lo que ayer eran noches de insomnio, sueños a la luz de la poesía y hoy no son mas que rastros sin luz de restos a oscuras. Abandonos. Abandonados.
Tuve que sentarme. Encenderme un piti y soñar con caer rendido a la evidencia de la realidad. Algo así como desmayarme por sobredosis de sombras. De silencios.
-Evolución- pensé.
-Años- pensé.
Y me di cuenta de que allí seguía, con las mismas pesadillas que hace cinco años cuando me escondía entre las sabanas de la vida intentando que nadie me viera. Intentando sudar, como si las lágrimas se evaporaran tan fácilmente.
Entonces, mientras apenas podía respirar, todo se nubló. Comenzó a llover y todo se mojó con los retales que deja el tiempo.
Quimeras.
Invierno.
Y entendí que seguía estando herido. Que seguía intentando escondeme para no verme a mi mismo. Que seguía librándose en mi una lucha a verso limpio. Que todavía era incapaz de quitarme la camiseta, mirarme, aceptarme. Dejarme ver.
Cerré los ojos con fuerza.
No desperté.
Sangraba.
Palabras tristes.
Triste realidad.

24 de julio de 2015

Nosotros.

Con la gigante @inmyownpoem

http://devenasconhumoypalabras.blogspot.com.es/2015/07/nosotros.html?m=1

21 de julio de 2015

Te echo de menos.

Echo de menos tus manos acariciando la luna llena,
tu mirada a oscuras
y tu silencio gritando a plena luz de la poesía.

Echo de menos sentirme eterno
soñando despierto
en tu pecho.

Encontrarte en cada verso de Benedetti.
Saberte desnuda,
infinita.
Cogerte de la mano,
perder el miedo.
Que me dejes sin palabras.
Tu risa retando al olvido.
Tus susurros.
Tus lunares,
camino;
tus clavículas,
precipicio.
Tu sabor a desenfado,
y tu olor a magia.
Tus noches de insomnio,
tus pesadillas.
Tu puta locura.
Tus besos,
mi sonrisa.
Todo ello, lo echo de menos.

Siento la redudnancia
pero joder,
no puedo decirlo mas fuerte...
Te echo de menos.

Y me quedo corto.

23 de junio de 2015

Carta a la eternidad.

Siento si he tardado en escribirte,
es que estuve luchando contra el insomnio;
esconder las lágrimas 
lleva su tiempo,
y aceptar la derrota,
aprender a perder,
siempre me ha costado.

Todo sigue,
no igual,
pero sigue.

Hoy empezamos la mudanza.
Empaquetar recuerdos
nunca fue algo fácil,
quizás el miedo al olvido sea demasiado fuerte
o quizás sea que aun siento frío
al volver la vista atrás.

Y es que ya ha pasado el tiempo.
Siete meses
desde que sentí el vacío mas grande
que estas metáforas,
proyecto de vida, 
recuerdan.
Siete meses 
desde que soñaste por ultima vez.
Siete meses 
desde qué el silencio
decidió que te quería sólo para el.

Pero las heridas siguen abiertas,
(o las cicatrices son demasiado grandes,
 no lo tengo claro)
las piernas temblando,
los labios sangrando,
a los versos ya nadie les susurra,
y mamá...
mamá sigue sin poder dormir.
No nos lo dice,
pero te echa de menos.
Como todos.

Porque volaste un soleado domingo
que dio paso al invierno mas frío de la historia.
Porque cada página de mi día a día
lleva tu marca en la esquina.
Porque dejaste en mi piel
la firma de la eternidad,
la huella de tu mirada.
Porque joder...
Te sigo necesitando.

Pdt: tus libros me los he quedado,
Neruda estaba demasiado sólo,
y su olor a poesía me recuerda a ti.

17 de junio de 2015

Caos.

Que no ser feliz ya no es nada nuevo por aquí" Charly Efe.

Siento vacío por dentro cada vez que miro al horizonte. Confundiendo el mar con el cielo, como quien confunde la vida y la ilusión. La fantasía y la realidad.

Nunca he sabido de verdades. Pero tengo un puto máster en insegurides. Y he saltado mil veces al vacío convencido de que el paracaídas no se abriría y la sangre mancharía cada una de las paginas de esta locura que llaman poesia.
(-Recuerdo en tinta.
Lucha en silencio.-)
Pero sigo aquí, sin saber. Ni por qué, ni para qué. Resulta que podía planear. Que tenia tres motores (amigos). Que no fallan. Y un montón de folios llenos de incertidumbre. "Te quiero's" arrancados de la piel, borrados a fuego, porque yo qué se, a veces miro al lado, y siento frío.

Así avanzamos, avanzo. Consumiéndome. Como un cigarro en unos labios secados a la intemperie del invierno.
Que es que ya no queda hierba y la noche cae. Y yo aquí, mirando un cielo que ha dejado de brillar. Oscuridad. Y estrellas. Como jode, que sean ellas las que me guíen hoy y no sus lunares. Quien sabe donde se quedaron. En que kilometro de este drama mal escrito, imperfecto, nos quedamos callados. Joder, si lo nuestro era recitarnos a susurros...
Y ahora,

caos
(Como en estas lineas desordenadas)

4 de junio de 2015

#PoesíaEresTú

I Ellos.

Eran y serán, siempre
luchadores a oscuras,
luchadores de causas perdidas,
obreros de realidades rotas.
Son ellos, son mis amigos.
                                     y joder, menos mal.


II Ella.

Olías como huelen las mañanas de invierno, en silencio. Sin quererlo
leíste la vida con los ojos cerrados, en braille, tocando cada bache. Pero mírate ahora
ganando batallas a tinta o muerte. Siendo valiente. Soñando. Mirando a los ojos
a la puta eternidad.



1 de junio de 2015

Revolución de a dos

Con @inmyownpoem creyendo y soñando con revoluciones.

Hoy que las nubes nos impiden ver el sol,
que está cubierta de lamentos la ciudad,
que visten de oro vencedores
y mueren presos los vencidos.
Hoy que el olvido ha inundado los ojos de los nadies
y la historia ha decidido acostarse
con esos que han jugado a encarcelar la libertad,
que se han reído de nuestras manos sangrantes de ilusión
y han fulminado, como la realidad al sueño, la esperanza.
Hoy que de nada sirve hacerse viejo sin haber muerto a diario
y sin diarios ni memorias nos entierran en olvidos de por vida,
hoy que el destierro de la Tierra podría salvarnos hasta el horizonte.
Hoy hemos decidido encapucharnos, taparnos la cara con dignidad
y salir a la calle llenos de rabia,
porque joder, Madrid,
que bonita estás cuando gritas,
cuando ardes,
cuando luchas.
Porque tomaremos el cielo por asalto
y el mundo como premio a todas las lágrimas derramadas,
a toda la sangre brotada en cada primavera.
Porque no es fácil armarse de dolor
y desahuciar las vestiduras del Gobierno
pero aún así,
será de fuego la corona y las vergüenzas,
el himno, la patria y la bandera,
se hará del límite el puente al infinito
para anidarnos en el universo sin cadenas
sin temores,
con la juventud eterna de quien ha perdido el miedo
y ha mirado a los ojos a la historia
susurrándola que vamos a ganar.

Que
venceremos

29 de mayo de 2015

Esencia.

Hace ya demasiado que bailas entre el arte,
que haces magia con la sonrisa,
y dibujas esas miradas infinitas que hasta Van Gogh miraría con envidia.
Hace ya demasiado, que haces poesía de la vida,
o vida de la poesía, (no lo tengo demasiado claro aún). 

Que llevas una vida enseñando a las noches
que en la oscuridad no sólo brilla la luna,
y que las estrellas no son más que los lunares de tu espalda
guiando al poeta a tu almohada,
abriendo la puerta al sueño.

Porque has sido la musa de amaneceres lluviosos
en el invierno más frío que ha aguantado este boli, 
ya sin apenas tinta.

Porque te he visto llorar con las manos vacías 
como lloraron las palabras un ya lejano 18 de agosto,
pero también he visto a la eternidad
 asomarse al abismo de tu clavícula,
y sentir vértigo,
miedo al vacío, al olvido.

Y es que en tu piel tienes escritas 
las letras más bonitas que a visto Madrid salir de Atocha, 
y claro, ¿así cómo voy a poder dormir?
Si tus piernas son las hermanas gemelas del insomnio, 
y tengo cada uno de tus susurros tatuados en mis labios,
que no se han cansado de sangrar desde el último beso,
desde el último -te echo de menos, idiota-

26 de mayo de 2015

Instantes.

El principio está en el instante que le robas a la historia para ser inmortal. Está en el momento en el que dejas de nadar a contracorriente. El principio, cuando quieres dejar de ser persona, para convertirte en palabra. Y entonces, tocas la retórica como tocarías las estrellas en una noche de esas de echar de menos. Rozas los labios y disparas sin precaución, porque el mundo es para valientes y a ti te he visto ganar batallas perdidas, lamer heridas y susurrar lágrimas.

Si, el principio está en ese instante, en el momento en el que buscas el oxígeno que a veces te falta,
(llamémoslo suicidio,
o simplemente invierno)
en su boca.
En el que su sonrisa, se convierte en la toma de tierra y a partir de ahí, te permites el lujo de volar.
Ese puto instante en el que escribirías sobre su espalda los versos mas sinceros que tus dedos se han permitido acariciar. Y ese instante, es la eternidad disfrazada de milésima. Milésima que con la boca abierta y las pulsaciones a mil saborea el baile de su cuerpo a oscuras.

Entonces, cuando eres consciente de toda su poesía, deseas que se pare el tiempo y que nunca se haga de día solo para poder quedarte a vivir allí. Y le haces un sitio, en la cama, en el folio, y en tu vida. Le haces censura y grito.
Le haces tuyo,
y secuestras su reloj,
como si con ello
le arrebataras su tiempo,
como si con ello
fueras capaz  de hacer
que esta noche,

sea cada noche.

12 de febrero de 2015

Somos, fuimos. Seremos

Fuimos bolis secos abandonados en cualquier papelera, fuimos dos cuerpos olvidados a la orilla de un invierno, fuimos el frío de no rozarnos, de no sentirnos, fuimos todos lo susurros, dirigidos y no firmados, tatuados en nuestros dedos, fuimos la lucha armada y la paz versada, fuimos la realidad golpeando cada despertar de madrugada.
La sombra de aquellos atardeceres abandonados en el fondo de un cajón, eso fuimos, corazones cargados de nostalgia, el miedo a sentirnos demasiado vivos. El querer recordar como nos hicimos. Fuimos las ganas de rendirnos, sonrisas desdibujadas, bocas gritándole al vacío. Fuimos... Viento, agua, pasado.
Pero ahora somos, somos futuro, brillo de esperanza en miradas que son gritos, somos constelaciones dibujadas en tu espalda por eso que unos llaman lunares y otros arte, somos labios sangrando antes de un beso de -venga joder, descansa y se feliz anda...-, somos lágrimas sinceras en ojeras moradas de tanto pelear con la verdad. 
Las manías, los errores, la forma difícil de hacer las cosas, lo complicado de cada situación, todos los fracasos. Y todas las victorias, eso somos. Lo bonito y lo doloroso de mirar directamente al sol. Somos el paso de las estaciones desde cada tren, desde cada mes. Somos la lluvia cayendo en el cristal y acariciando tus pestañas, somos un día gris, un verde esperanza y un rojo revolución... Somos, fuimos y seremos las hojas arrancadas de un libro de cortazar.... Somos vida, pero también sueños y pesadillas