El mar tras la ventanilla.
Al igual que tu,
tus miradas perdidas
tras la ventanilla,
de lo incierto,
de lo desconocido.
Vuelvo a verte,
quizás soñarte,
pero lo cierto
es que no te tengo,
y no te siento aquí,
conmigo...
...y...
Ya va siendo hora
de bajar la ventanilla.